viernes, 28 de septiembre de 2018

La importancia de la Osteopatía en la postura corporal


Si observamos anteriormente  vemos cantidad de esculturas en las que el personaje con diferentes posturas, estudiando estas posturas han llegado a la conclusión de que es la verdadera postura del individuo y podemos servirnos de ella para tratar al paciente: poniendo esta postura con un pie adelantado 10 minutos/día mejoramos las patologías del aparato locomotor y las psicológicas. El término Postura proviene del latín “positura”: acción, figura, situación o modo en que está puesta una persona, animal o cosa. Según criterios “mecánicos” la postura ideal se define como la que utiliza la mínima tensión y rigidez, y permite la máxima eficacia. Y permite a la vez un gasto de energía mínimo. Es aquella que para permitir una función articular eficaz, necesita flexibilidad suficiente en las articulaciones de carga para que la alineación sea buena. “La postura es la alineación corporal que se adopta espontáneamente en forma correcta o incorrecta; es la alineación de segmentos orgánicos que se adecua intencionalmente con fines de comodidad, diagnósticos terapéuticos”. “La postura es la posición del cuerpo con respecto al espacio que le rodea y como se relaciona el sujeto con ella y está influenciada por factores: culturales, hereditarios, profesionales, hábitos (pautas de comportamiento), modas, psicológicos, fuerza, flexibilidad, etc.”
La postura es interesante para los osteópatas ya que pone en evidencia los reflejos posturales, que en definitiva son los medios que tiene el cuerpo para luchar contra los desequilibrios. Estos reflejos posturales son lo que en Osteopatía llamamos “sistema de adaptación”. Esto quiere decir que si llegamos a evidenciar los reflejos posturales, luego los sistemas de adaptación, podemos saber si el paciente está adaptado o no a su patología. Si se adapta, el problema no es para nosotros (diagnóstico diferencial). Si no se adapta, iremos a mirar las piezas anatómicas del sistema de adaptación para ver si son La postura es interesante para los osteópatas ya que pone en evidencia los reflejos posturales, que en definitiva son los medios que tiene el cuerpo para luchar contra los desequilibrios.
Estos reflejos posturales son lo que en Osteopatía llamamos “sistema de adaptación”. Esto quiere decir que si llegamos a evidenciar los reflejos posturales, luego los sistemas de adaptación, podemos saber si el paciente está adaptado o no a su patología. Si se adapta, el problema no es para nosotros (diagnóstico diferencial). Si no se adapta, iremos a mirar las piezas anatómicas del sistema de adaptación para ver si son funcionales en su papel de pivots, es decir, la posturología nos va a dar la adaptación o no del  cuerpo, el diagnóstico diferencial y si el tratamiento es válido o no; los test tiene que mejorar al final  el tratamiento.

Percepciones y experiencias del tratamiento Osteopático en pacientes con cáncer

Esta investigación tuvo como objetivo explorar las percepciones y experiencias de los pacientes con cáncer que reciben tratamiento osteopático, como una terapia complementaria cuando se utiliza, además del tratamiento convencional médico para el dolor. Este estudio cualitativo empleado fue, conocer entrevistas de pacientes con cáncer en una unidad de cuidados paliativos en Lyon, Francia, que recibieron el tratamiento de un osteópata junto con su tratamiento convencional contra el cáncer. Se analizaron los datos utilizando la teoría fundamentada y métodos cualitativos. Los investigadores entrevistaron a 16 pacientes. Los temas identificados a través del análisis incluyeron un escaso conocimiento de la Osteopatía en la población y un alto nivel de acompañamiento de ideas falsas. Los beneficios descritos del tratamiento de Osteopatía fueron  como más que los tratamientos manuales con los participantes valorar la Osteopatía como un enfoque holístico, meditación y no farmacéutica. Los participantes también describieron los tratamientos de Osteopatía como una ayuda para la variedad de problemas de salud relacionados con el cáncer, tales como problemas de dolor, fatiga y trastornos del sueño. Ofreciendo tratamiento osteopática en una ubicación accesible a bajo o ningún costo fueron identificados por los participantes como facilitadores al uso continuado de la Osteopatía. Los resultados de este estudio proporciona datos preliminares que sugiere, que cuando se se realiza  el cuidado médico existente,  unido a la osteopatía puede tener beneficios para la salud de los pacientes con enfermedades complejas como el cáncer.

Tratamiento manipulador osteopático para resolver el dolor de cabeza y cuello después de la extracción de un diente

Después de la extracción dental, la mayoría de los pacientes tienen dolor que dura menos de 1 semana y puede controlarse con analgésicos. La duración, el tipo y la gravedad del dolor varían como resultado de múltiples factores, como la dificultad del procedimiento de extracción, el estado y la actitud de salud del paciente y el sexo del paciente.1 Otros síndromes de dolor que pueden ocurrir semanas después del procedimiento aunque son raros: incluyen dolor neuropático, trastorno temporomandibular,  cefalea en racimos,y dolor en el cuello y en la cabeza causado por disfunción somática.6,7 El dolor prolongado y el dolor no resuelto deben investigarse para tratar afecciones reumatológicas, tumores, cefalea migrañosa o síndrome de dolor miofascial. Las características etiológicas del dolor de cabeza y cuello después de procedimientos dentales son multifactoriales, dependiendo del tipo de procedimiento, la dirección y la cantidad de fuerza utilizada, y los factores predisponentes del paciente (por ejemplo, lesiones previas). El dolor de cabeza y cuello posextracción no es una condición bien documentada, aunque se observa en la práctica clínica. El uso del examen estructural osteopático y la aplicación del tratamiento manipulador osteopático (TMO) apropiado para resolver la disfunción somática puede ser ofrecido por médicos osteópatas como modalidades de tratamiento más allá del tratamiento farmacológico y quirúrgico, o sin ningún tipo de tratamiento. El siguiente caso es un ejemplo del uso de este tratamiento para resolver el dolor de cabeza y cuello en un paciente después de la extracción dental.
Informe de caso Un hombre de 52 años de edad presentó dolor de cuello, dolor de cabeza y dolor lumbar que comenzó hace 2 semanas. Estos síntomas comenzaron después de una extracción de la parte superior derecha del diente, así como también después de que había estirado demasiado su cuello y se había sobreexcitado mientras empujaba un automóvil. Él creía que estos eventos contribuyeron a su dolor. Caracterizó su dolor de cuello como “alfileres y agujas”, una sensación que irradiaba a su cabeza sin causar mareos. El dolor mejoró un poco con duchas de agua caliente y aspirina, y empeoró con el movimiento. Describió el dolor en su espalda como la rigidez y la rigidez con el movimiento. Dijo que no tenía debilidad, parestesia o incontinencia intestinal o de la vejiga. El paciente trabajó como vendedor de repuestos para camiones. El historial médico del paciente fue positivo para hipertensión, depresión y dolor lumbar, que su médico de atención primaria había manejado previamente con el tratamiento. El paciente no tenía alergias medicamentosas conocidas. Sus medicamentos actuales incluyen lisinopril / hidroclorotiazida, 20 mg / 12.5 mg al día; paroxetina, 20 mg al día; y un multivitamínico. Una revisión de los sistemas fue positiva para los ojos doloridos y una sensación de plenitud en su oreja izquierda. El examen físico reveló signos vitales normales. El paciente pesaba 172 lb y tenía una altura de 5 pies 8 pulg. Resultados de cabeza, ojo, oído, nariz y garganta; cardiovascular; pulmonar; y los exámenes neurológicos no fueron notables. El examen musculoesquelético arrojó resultados positivos para la musculatura lumbar y paraespinal cervical, flexible y sensible, con una menor rigidez torácica y lumbar, pero con un rango de movimiento intacto. El médico tratante en el momento de esta visita inicial al paciente le diagnosticó una distensión cervical y lumbar y prescribió acetaminofen sin receta médica según fuera necesario; metaxalona, ​​800 mg, antes de acostarse; ejercicios de rango de movimiento; y una restricción de levantamiento de no más de 20 lb, con seguimiento en 2 semanas si no hay mejoría. No se realizó una evaluación de la disfunción somática, pero el paciente fue remitido para OMT o tratamiento quiropráctico. El paciente no realizó el seguimiento según lo programado y no vio a un especialista externo. Sin embargo, hizo un seguimiento de 2 meses después de su visita inicial con su médico de atención primaria  debido a los síntomas continuados. En esta visita de seguimiento de 2 meses, describió dolor de cuello que irradiaba a la parte superior de la cabeza y detrás de los ojos, así como a la zona posterior del brazo derecho. Su dolor de cabeza fue calificado como un 5 constante en una escala de dolor de 10. Él negó debilidad, entumecimiento u hormigueo. El dolor se aliviaría con el ejercicio, las duchas con agua caliente y el uso del relajante muscular.

El síndrome del túnel carpiano (STC)

El síndrome del túnel carpiano (STC), o neuropatía compresiva del nervio mediano a la altura del carpo, es la mononeuropatía más frecuente en la práctica clínica. Tiene una prevalencia estimada de 125 casos por cada 100.000 personas, aunque existen estudios que apuntan a una prevalencia de hasta el 1% de la población. Los signos y síntomas clínicos son parestesia de la mano, dolor de la extremidad superior, signo de Tinel a la percusión sobre el nervio mediano en la muñeca, signo de Phalen, pérdida sensorial en la distribución del nervio mediano y debilidad y atrofia tenar. Muchas de estas manifestaciones clínicas no son exclusivas del STC y, con frecuencia, la correcta distinción entre las distintas causas de los signos y síntomas de la extremidad superior tiene importantes implicaciones terapéuticas.
Las pruebas diagnósticas que tenemos en Osteopatía nos dan información precisa de las alteraciones localizadas o referidas que están implicadas en el STC. Es importante precisar cada una de las pruebas y adaptarlas al contexto diagnóstico para determinar la causa de la patología.
La electrodiagnosis, que incluye estudios de conducción del nervio motor y sensorial, y estudios de aguja electromiográfica (EMG), desempeña un diagnóstico importante dentro de la medicina tradicional con los pacientes con posible STC, la Osteopatía no considera a esta prueba una prueba definitiva. Muchos de los pacientes diagnosticados como positivos por medio de  esta técnica posteriormente han sido tratados por un Osteópata a través de movilizaciones osteopáticas cervicales y han sido liberados del STC, lo cual quiere decir que sí que había una radiculopatía y que ésta era la causante de la alteración, pero con la particularidad de que ésta,  tenía su origen en la columna vertebral cervical y no como generalmente se piensa, sólo a raíz de la compresión de la conducción nerviosa de la muñeca.
Un reconocimiento clínico osteopático y neuropático a través de las pruebas fisiológicas que debe conocer cualquier Osteópata puede contribuir a identificar estados patológicos  que imitan el STC, como radiculopatía cervical, plexopatía braquial, neuropatía proximal del nervio mediano u otras mononeuropatías de la extremidad superior o neuropatía periférica.
Si la pruebas y baterías efectuadas son negativas, es posible que los síntomas del paciente no se deban a una neuropatía sino a otras causas, como artritis o tendinitis. En tales casos los tratamientos de recuperación funcional deberían enfocarse en concepto de su base patológica.
A pesar del indudable valor de los estudios de conducción del nervio y EMG en la evaluación de pacientes con posible STC, estas pruebas pueden estar infrautilizadas en la práctica clínica. Dado que el STC se ha convertido en un problema importante de salud pública debido a la frecuencia de su aparición en el entorno laboral y a la posibilidad de derivar en lesión por esfuerzo repetitivo, su diagnóstico y tratamiento han atraído la atención de muchos organismos y de las administraciones públicas.
La medicina tradicional tiene una forma de eliminar la sintomatología muy peculiar, ésta consiste en la liberación del ligamento transverso del carpo con anestesia local sin necesidad de torniquete (bupivacaína 0,5% sin adrenalina) y coagulación bipolar. La anestesia local se inyecta dentro del túnel carpiano y en el tejido subcutáneo de proximal a distal, para hacer más cómoda la
infiltración a partir de ahí se interviene quirúrgicamente. Posteriormente a la intervención el tejido cicatrizal que se generará contribuirá a que al cabo de un tiempo no mayor de dos años la mayoría de estos pacientes intervenidos vuelvan a tener el mismo o mayor problema del que había, porque sigue estando la causa que produjo el problema más el tejido cicatrizal de la intervención quirúrgica a la que se sometido el paciente.
La complicación por dolor persistente a largo plazo puede aparecer por cualquiera de las causas siguientes: cicatrización cutánea hipertrófica, cicatrización intra y perineural, adherencia del nervio a la piel, del nervio al tejido subcutáneo, adherencias entre tendones flexores y el nervio mediano, dolor de pilar en las eminencias tenar e hipotenar y distrofia simpática refleja. Las cicatrices hipertróficas suelen ser el resultado de una incisión que atraviesa la línea de flexión en ángulo recto. Si se produce una cicatriz hipertrófica dolorosa pese a todos los intentos de evitarla, es preciso revisarla. La cicatrización intra y perineural produce a veces disestesia, dolor e

La propuesta de la Osteopatía o terapia biológica es encontrar la etiología de la patología, siguiendo un orden de tratamiento y posterior recuperación. Las diferentes vertientes etiopatogénicas pueden tener distintos frentes de abordaje terapéutico, en tal caso pueden haber afecciones en la misma articulación del carpo, éstas pueden nacer en el codo,  siendo esta la articulación vecina más importante, pueden llegar desde el hombro y por supuesto desde la zona cervical. Este ultimo eslabón es el que no considera la medicina tradicional como uno de los mayores desencadenantes y productores de patologías del miembro superior, siendo para el Osteópata una zona importante en la que desarrollar su perspicacia diagnóstica y terapéutica.hipersensibilidad. Es importante una hemostasia adecuada para evitar la cicatrización perineural. Si se desarrollara cicatrización intra y perineural a pesar de los esfuerzos del cirujano por evitarla, la hipersensibilidad y la disestesia remiten al cubrir el nervio con una matriz dural de colágeno. La posición superficial del nervio mediano y la adherencia del nervio a la piel suelen ser consecuencia de una incisión inadecuada directamente sobre el nervio, en vez de hacia el cúbito.

Historia de la Osteopatía



  • La Osteopatía fue estructurada a finales del siglo XIX, en los Estados Unidos por un médico y cirujano llamado Andrew Taylor Still. Fue el primero en poner en evidencia las interrelaciones que existen, por un lado entre el sistema músculo-esquelético y los otros sistemas orgánicos, y por otro lado, entre la movilidad y la libertad de esos distintos sistemas y la salud del hombre.

  • No es, pues, una ciencia nueva. Entre los años 1870 y 1874, Still tuvo sus primeras experiencias osteopáticas; después de haber curado a un niño con disentería, trata y cura a otros 17 pacientes más.
  • El 22 de Junio de 1874, decide crear una nueva medicinala Osteopatía.
    Still emitió la hipótesis de que el inmenso tejido de sostenimiento del cuerpo llamado ‘fascia’ -que reúne todos los elementos del cuerpo humano (huesos, articulaciones, vísceras, glándulas, vasos, nervios)- pudiera ser el tejido más importante del cuerpo y ser el orígen de numerosas patologías del hombre cuando restringe la circulación de los fluidos (sangre, linfa, líquido cefalorraquídeo) al ser los lugares de intercambios que permiten a las células recibir las sustancias que necesitan para vivir y cumplir con sus funciones.
  • Para difundir su enseñanza, Still fundó en 1892 la American School of Osteopathy en Kirksville, Missouri. Otros, como W.G. Sutherland, J. Littlejohn, H. Magoun, V. Frymann continuaron su obra y permitieron dar a la Osteopatía sus letras de nobleza, gracias a sus trabajos de investigación.


¿Cuáles son los principios fundamentales de la Osteopatía?


A.T. Still hizo una síntesis de todas sus observaciones y de su experiencia práctica, lo que llevó a la definición de tres grandes principios en los cuales se basa la Osteopatía:
  • La ley de la arteria :
 El hombre tiene su propio sistema de defensa contra los microbios y genera una autorregulación de sus funciones, pero sólo si sus células reciben todo lo que necesitan para funcionar, generarse y eliminar las toxinas. Eso significa que todos los líquidos del organismo que transportan los nutrientes y residuos, deben de circular libremente. El papel de la arteria es supremo.
  • La estructura gobierna la función :
 No sólo es importante la integridad del sistema de regulación neurológico y hormonal, sino también el del esqueleto a fin de conservar la libertad de movimiento de todos los tejidos. Es el movimiento el que permite a los líquidos que bañan los tejidos y las células el ser renovados.
  • La unidad del cuerpo :
 El osteópata propone reequilibrar el esqueleto, los músculos, los ligamentos a fin que todos los líquidos circulen correctamente; atribuirá una importancia muy particular a la columna vertebral, el pilar de la armadura, que contiene el sistema nervioso autónomo.
Todas las partes del cuerpo son interdependientes lo que confiere al hombre su especificidad y su inocuidad. Still habla de estructura pensando en la armadura humana y habla de función pensando en los distintos órganos que aseguran las funciones vitales. De ahí el origen de la palabra Osteopatía que procede del griego osteon (hueso – estructura) y pathos (influencia que viene del interior): la Osteopatía es el tratamiento de las afecciones procedentes de los trastornos en la estructura corpórea.

¿Cuáles son los Tratamientos Osteopáticos esenciales?


La Osteopatía trata principalmente las patologías musculoesqueléticas más frecuentes que se dan en las consultas de atención primaria y en las urgencias hospitalarias: Lumbalgias, cervicalgias, dorsalgias, esguinces cervicales y de tobillo, omalgias (dolores de hombro), tendinitis, artritis y en definitiva aquellas afectaciones osteomusculares habituales.También es muy eficaz en casos específicos de migrañas, vértigos, otitis, problemas circulatorios, digestivos, endocrinos, ginecológicos, urológicos, neurológicos, traumatológicos, etc.
 Tiene además buenos resultados en Pediatría, tanto en neonatos como en infantes en donde las patologías tratadas con Osteopatía pediátrica más frecuentes son: Plagiocefaleas, tortícolis, cólico del lactante, alteraciones del sueño, irritabilidad, estreñimiento, escoliosis, parálisis braquiales, esguinces, etc.
 Sustancialmente, existen tres tratamientos en Osteopatía:
  • Estructural, que se dirige especialmente a los trastornos de las estructuras óseas, musculares y articulares.
  • Visceral, que se interesa por los órganos como el hígado, el riñón, el estómago…
  • Craneal, que insiste en la noción de movilidad de los huesos del cráneo y se dirige al desarrollo del recién nacido, del niño, así como a los trastornos funcionales del adulto.

Diafragma

El diafragma es un órgano vital para los mamíferos, ya que es el músculo primario para la respiración. La parálisis diafragmática es la ...