Antes de desarrollas nuestra
interpretación de la evolución mecánica de la pelvis, consideramos importante
recordar algunos principios fundamentales de la medicina osteopática.
A principio de siglo J.M. LITTLEJOHN
señalaba: “Se debe adecuar el individuo a su entorno” porque todos los
fenómenos o situaciones exteriores desencadenan en el individuo, unos estímulos
que lo harán reaccionar según sus predisposiciones desde su nacimiento, el
hombre como todo ser vivo, sufre las consecuencias de la gravitación universal.
El sistema de acomodación
neurovegetativo, compuesto por los sistemas simpático y parasimpático e
hipotálamo, recibe las influencias del medio externo. Este sistema da nacimiento a todos los estados patológicos
cuyos factores de predisposición pueden ser hereditarios o congénitos.
Para nosotros el ser humano está
formado de tres elementos:
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El factor psicológico (el cerebro influye
sobre el sistema neurovegetativo).
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El factor bioquímico (lo visceral está regido
por el sistema neurovegetativo).
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La componente estructural (las estructuras
óseas actúan sobre el cerebro a través de la caja craneal, así como sobre el
sistema neurovegetativo a través del canal medular).
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El sistema neurovegetativo desempeña
un papel muy importante, pero se encuentra alterado con mayor facilidad que el
cerebro ya que su componente estructural, el canal medular, es menos sólido que
la caja craneal.
Por supuesto que está clasificada es
muy arbitrario, porque en realidad todos estos elementos se confunden y son
dependientes los unos de los otros y bajo el control del sistema
neurovegetativo se unifican para formar el conjunto homogéneo y complejo que es
el ser humano.
El osteópata debe considerar al
paciente en su totalidad, sin elidir ninguno de estos elementos, debe apoyar
toda su terapia sobre el principio de lesión total descrito por FRYETTE:
“Esto implica hacer el balance de todos
los factores (o lesiones) individuales, sean mecánicas o de origen no mecánico
que se han puesto en juego en un sujeto, en cierto momento, y que causan o
predisponen a un estado patológico (desequilibrio).”
Consideramos que toda curación es
una auto curación. De ahí que el objetivo de toda terapéutica deba ser el
devolver al organismo su posibilidad de auto curarse, haciendo parecer todo
impedimento bioquímico, estructural o psicológico que haya aparecido.
Par el osteópata, los miembros
inferiores están suspendidos a la columna vertebral a través de la pelvis.
